La Matrix

Por: CP & MBA José Francisco Sandoval Villegas

Resulta hasta cierto punto irresponsable cuando la autoridad o gobierno no asume su papel como tal y sólo se dedica a ser un espectador más de las situaciones que ella misma provoca o debería de procurar.

Es de suma importancia tener un claro pronunciamiento de las afectaciones económicas y financieras que esta pandemia esta provocando tanto a nivel municipal, estatal y federal, pero cuando se observa que la autoridad no quiere (quizás NO PUEDE) emitir un diagnóstico de lo que esta costando esta pandemia, entonces es cuando se deja a la ciudadanía a su suerte para que sortee de la mejor manera posible y de acuerdo a sus posibilidades dicha situación.

Por una parte, un gobierno totalmente rebasado en sus protocolos de actuación y de reacción, incapaz de establecer un plan que aminore el impacto financiero de la pandemia, y si bien es cierto que es un problema global al cual ningún país ni gobierno pudo enfrentar de manera adecuada, lo cierto también es que hay mucha diferencia entre el no saber y el no querer saber.

A la fecha usted puede sentir o vivir las afectaciones, dependiendo de a lo que se dedique y haga para ganar el sustento diario, podrá sin lugar a dudas ir a la tienda de la esquina y comprar algún producto que consume de manera habitual y ver como el precio del mismo ya encareció en estos meses, dato que ya el INEGI dio a conocer del aumento de la inflación y que por otra parte esta debería de ser la verdadera curva que debería de cuidar y de combatir este y cualquier otro gobierno que llegase al poder.

Este gráfico muestra el comportamiento de la misma en lo que va del año y del como se observa una tendencia al alza de la misma.

En tiempos del buen fin una práctica abiertamente Neo Liberal se observa de nueva cuenta como un personaje como AMLO sólo juega con el electorado que le benefició y de su pobre educación financiera al permitir esta práctica, ¿Por qué? Porque le beneficia, y es algo que ha estado aprendiendo a la mala y que, si no respeta a los mercados, al dinero o la manera en que este se genera, la realidad le vendrá a dar de golpes una y otra y otra vez.

Lo malo para los mexicanos es que el señor es necio y no entiende razones y en esa cerrazón no le importa llevarse al baile a quien sea con tal de creer ciegamente en su poco o nulo conocimiento de economía, tal y como lo demuestra a lo largo de su vida política en el país, o en su más reciente libro “Hacia una economía Moral”, donde de economía no dice nada y acude a una formula de señalar como eran las cosas del pasado y decir una y otra vez que la mafia del poder robaba a manos llenas, pero que cuando el gobernara eso se acabaría, bueno pues… creo que es justo decir que el ya gobierna… y todos sabemos cómo marcha la novela.

Lo que si queda claro es la postura de AMLO al respecto

“Si las empresas quiebran, que quiebren”

“El mercado regulará al mercado”

En estas dos frases englobamos toda una filosofía económica que de manera simplista nosotros podríamos decir que a AMLO no le interesa en lo más mínimo, sin embargo, de manera más profunda también estamos hablando de una especie de selección natural para las empresas que mejor pudieron enfrentar la pandemia debido a su preparación administrativa o simplemente porque les ha costado muchos billetes mantenerse a flote.

Y por parte de la regulación de los mercados, en realidad dudo mucho que sepa quien lo dijo y en el contexto por lo cual lo dijo… lo cierto es que es sumamente doble moral (o quizás increíblemente ignorante) al momento de priorizar sus proyectos de nación como el tren Maya, el aeropuerto o la refinería y dejar que los mercados se regulen solos