Por: CP & MBA José Francisco Sandoval Villegas
Una vez más estamos en ese escenario de tristeza que nos brinda el deporte, cuando algún equipo al que le tenemos aprecio es eliminado de alguna competencia, sólo que esta vez se trata de el equipo de todos, la selección mexicana de fútbol… sea usted o no, aficionado al fútbol, se debe de considerar y tener en cuenta que, al menos en México, es el deporte preferido de las masas y que representa mucho para la sociedad, tanto así que transmiten los partidos tanto en espacios públicos como privados, y este tipo de cosas no las provoca algún otro deporte en el país.
En términos de desarrollo económico y social el termómetro que marca el deporte en las primeras posiciones del ranking mundial, está en gran medida relacionado tanto con el desarrollo económico como social
Si usted pone atención a los eventos como los juegos olímpicos en el medallero podrá percatarse que quienes dominan este ranking, son potencias económicas, y ese poderío económico también se ve reflejado en el desarrollo o apoyo a sus deportistas.
Tristemente en México la cosa es muy diferente, ya que tenemos un mal cultural tal y como lo dijo el expresidente Peña Nieto, ese mal cultural llamado Corrupción y que tanto daño ha hecho en muchos otros ámbitos además del deportivo.
Hay mucho que se puede decir del desempeño de la selección mexicana en esta ocasión, pero vayamos al terreno meramente deportivo, ya que al igual que como mencioné en alguna ocasión anterior, hablando de temas económicos, la clave es la competitividad.
No podemos pretender que nuestros jugadores mexicanos tengan ese desarrollo con reglas en el fútbol donde se permiten tener tantos extranjeros jugando, un torneo de fútbol donde de 18 equipos pasan 12 a la segunda fase, que dicho también sea de paso sólo sirve para generar más dinero por entradas y nada tiene que ver con mejorar el nivel de juego, ya que de cierta forma el número 12 es hasta cierto punto mediocre que pueda llegar a ser campeón, campeón que por cierto sólo tiene vigencia de 6 meses. Un fútbol mexicano en el cual el sistema de descenso no está vigente y por consiguiente los equipos no tienen esa presión de mejorar o tener un plan de trabajo para evitar ese descenso.
Mucha gente, el día de hoy (me incluyo), sentimos una vez más (como cada 4 años) una desilusión por el desempeño de la selección y culpamos al primero que vemos al frente del equipo que también tiene mucha, pero mucha culpa, aun así el director técnico en esta ocasión sólo es la punta del iceberg.
De todo ese proceso que se llevó a cabo por el “Tata” Martino, le respeto la posición de NO llevar a jugadores indisciplinados y que se creen intocables, como el Chicharito Hernández, ellos los futbolistas deben de ser ejemplo para la niñez y la juventud, y en ese sentido ya tienen más responsabilidad con la misma sociedad, eso si, lo que le reprocho es que debería de ser parejo para todos los indisciplinados.
En fin el tema da para mucho más análisis deportivo y también económico que es por demás interesante saber cuánto representa para los capitales que están involucrados.
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